dissabte, 18 d’abril del 2020

Cap. 6986: Los jugadores se rebelan al ADN

El 26 de abril de 1925, una derrota contra el Athletic de Madrid (2-1) igualaba la eliminatoria de semifinales de la Copa de España. En la prensa catalana se critico y mucho de la delantera, culpaba a los defensas Surroca o Marin por su juego violento y por el penalti que provoco el primero cuando iban empatados. En el Mundo Deportivo, se definía asi al Barça:
"No ha habido juego de equípo, ha jugado cada cual para si y los ha habidado que no han jugado ni para el equipo, ni para ellos; en cuanto a juego de líneas tampoco hemos tenido ocasión de verlo si exeptuamos a Platko y a los medios. El Barcelona puede y debe rendir más, mucho mas de lo que rendió de el de Les Corts.
iEl Barcelona puede y debe dar mayor rendimiento. ¿Lo dará? Ecco il problema"
No es de extrañar que tras la victoria en el desempate (victoria por 1-2), jugado el 3 de mayo de 1925 en el Xut! una caricatura (de Ricard Opisso) mostraba a los jugadores bailando una sardana, mientras en el centro ardía un fuego con mensajes a los aficionados, diarios...