dissabte, 8 de desembre del 2018

Cap. 5112: ¡Arriba el Barça!

El 17 de julio de 1973, se presentaba ante su afición el FC Barcelona. Un poco nervioso en el parlamento, posiblemente por que aún no estaba solucionado el fichaje de Johan Cruyff, el Presidente Blaugrana, Agusti Montal i Costa estuvo a punto de sufrir un lapsus verbal bastante espectacular. Al termino del discurso se le escapó un... "¡Arriba Esp...", pero rectifico a tiempo para proclamar un "¡Arriba el Barcelona! ¡Viva el Barça! ¡Visca el Barça! endevant"

Cap. 5111: River, un "amigo" del FC Barcelona

A lo largo de la historia, hasta once futbolistas (Caffaretti, Loayza, "Negro" Cubilla, "Milonguita" Heredia, Pizzi, "Tito" Bonano, Sorín, "Conejo" Saviola, "Gallina" Maxi López, "Jefecito" Mascherano y "Niño Maravilla" Alexis Sánchez) han defendido hasta ahora las camisetas del FC Barcelona y de River Plate. Más allá de la cifra, tal vez los dos jugadores más representativos de esa lista sean "el Conejo" Saviola y "el Jefecito" Mascherano. Entre los onces, hay ocho argentinos y tres extranjeros: Loayza (Peru), Cubilla (Uruguay) y Alexis Sánchez (Chile). Asimismo, tres fueron transferidos directamente desde River al Barça (Bonano, Saviola y Maxi López), mientras que cuatro han sido los que desde el Camp Nou aterrizaron en el Monumental (Loayza, Cubilla, Pizzi y Medrano). Siempre sin contar con "la Saeta Rubia" que pertenecía a River, pero se había ido a jugar al Millonarios de Colombia, cuya liga era considerada "pirata" por la FIFA. En 1953, Di Stéfano debía volver a River, club que tenía sus derechos, y emisarios del Barcelona llegaron a Buenos Aires, donde ficharon al genial jugador. Por su parte, el Real Madrid también lo fichó, pero al Millonarios. La cuestión es que "Minellita" viajó a la Ciudad Condal, donde se entrenó e incluso llegó a debutar en un amistoso. Y ahí se abre la controversia, porque luego viajó a Madrid, y ambas entidades lo reclamaron como propio. En su momento se falló en que juegue una temporada en cada equipo, situación que el Barça desistió denunciando presiones políticas en tiempos de Franco.