
La edición especial estaba disponible sólo a través de la página de Facebook. Para conseguir una de las botellas, los usuarios debían publicar un comentario en la fanpage de Moritz con su opinión sobre el partido e ir a recoger la botella a las oficinas de Moritz en la capital catalana. La campaña tuvo una gran acogida entre el público culé.
La marca trató así de crear un lazo afectivo con el público barcelonista, y diferenciarse de otras cervezas mediante la segmentación, aunque para ello tenga que renunciar al público madridista. Moritz ya había protagonizado con anterioridad acciones similares, como cuando regaló la bufanda del Alcorcón, un club de 2ªB que eliminó al Real Madrid en la Copa del Rey
Cap comentari:
Publica un comentari a l'entrada