dimecres, 14 de març del 2018

Cap. 4236: El fichaje de Albadalejo

La magnífica temporada de Albaladejo, en la 1973/74, hizo que varios clubes dirigieran su mirada a Alicante. Por entonces, el Hércules mantenía buenas relaciones con el FC Barcelona de donde habían llegado futbolistas internacionales como Fusté y Eladio. Las referencias que dieron los dos exblaugranaa de Albaladejo junto a la vinculación de Josep María Minguella, directivo del club catalán, con José Rico Pérez resultaron determinantes para que el Barça apostara fuerte por el joven jugador alicantino.
Tras una cena en el antiguo restaurante Delfín, en la que Albaladejo se reunió con Minguella y Fusté, quedó consumado un traspaso cifrado en 12 millones de pesetas (cerca de 80.000 euros actuales), una cantidad muy importante en la época. La operación también incluyó la presencia del FC Barcelona de Johan Cruyff en el partido inaugural del nuevo estadio José Rico Pérez y la incorporación de varios barcelonistas a la plantilla del Hércules como Barrios, Juanito y Carreño que dieron un extraordinario rendimiento en Alicante, convirtiéndose todos ellos en piezas fundamentales del mejor equipo blanquiazul de la historia.

Cap. 4235: Josep Argemì Rocabert (1974)

Nació en Sabadell, 10 de febrero de 1911 - Sabadell, 3 de octubre de 1974. Fue un futbolista catalán de la década de 1930. Empezó a destacar en el EC Granollers en 1931. En 1934 ingresó en el CE Sabadell y un año más tarde fue fichado por el FC Barcelona. Con el Barça jugó cinco temporadas, tres de ellas durante la Guerra Civil y ganó dos Campeonatos de Cataluña, una Liga Mediterránea y una Liga Catalana. Finalizada la Guerra Civil Española volvió al CE Sabadell. También jugó con la selección catalana de fútbol entre 1934 y 1936. También fue entrenador del CE Sabadell la temporada 1949/50

Cap. 4234: Antonio Pais Castroagudín (2018)

Nació en Padron (La Coruña) el 7 de diciembre de 1938 - Fallece en Santiago de Compostela (La Coruña), el 14 de marzo de 2018. Ficho por el FC Barcelona en la temporada 1961/62. El Barça pagó 1.800.000 pesetas por sus servicios al Celta y Pais firmó por tres años a razón de 300.000 por temporada. Pero su paso por la entidad barcelonista fue fugaz: solo una temporada (1961-62). Uno de los más complicados de la historia. El equipo había perdido la Copa de Europa y había vendido a Luis Suárez al Inter de Milán por 25 millones de pesetas. Con el dinero de los italianos el Barça fichó a Zaldúa, Zaballa, Pereda...
Era un medio volante de gran clase y visión de juego, un pulmón en la zona ancha. Pero el Barça, a final de temporada, viendo que las cosas seguían sin funcionar y que Pais no había cuajado en el equipo, le buscó una salida y lo traspasó al Mallorca, aunque estuvo muy cerca de recalar en el Espanyol.

Cap. 4233: La lesión que pudo acabar con Messi [IV]

Inevitablemente surgieron las dudas. Al padre de Messi aún se le humedecen los ojos cuando recuerda la escena que tuvo lugar en aquel piso, cuando se acercó al niño para plantearle una cuestión importante.
- "Lío, qué querés que hagamos. ¿Volvemos?"
- "No, papá, yo quiero triunfar en el Barcelona".
Durante su recuperación, se hizo habitual verle de pie, con sus muletas, junto al campo donde sus compañeros entrenaban, mirando el balón con una añoranza infinita. Durante los tres meses de recuperación apenas solto una lágrima, mientras que eso era muy habitual en Diego Capel, jugador andaluz que acabó abandonando la cantera del Barça. Cuando el peroné de su zurda mágica se recuperó, formó parte del afamado equipo de la "Quinta del ’87", con Piqué, Cesc y Víctor Vázquez, tanto en el infantil A como en el cadete, que lo ganaron todo a nivel catalan como estatal

Cap. 4233: La lesión que pudo acabar con Messi [III]

El partido prosiguió. El Barça se adelantó 2-0, pero en el minuto 22 Marc Baiges recibió una perfecta asistencia de su amigo Jordi Pitarque para superar al portero con un chut que impactó en el poste antes de entrar. Las imágenes del partido demuestran que lo celebró alborozado, como el niño que era, y que huyó de la piña de abrazos para ir a agradecérselo a "Pita". Al final, el resultado fue de 5-1 y el guardameta es de los pocos recuerdas que conserva en su memoria algo del partido, Marc es una finta que le hizo Mendy en uno de sus tres goles: "Aún lo busco", dice a los medios. Evidentemente como Messi, aún no era lo que es actualmente, Marc desconoció hasta recientemente, gracias a la prensa2 el alcance de la lesión, fractura de perone, primera y única fractura del jugador blaugrana en su carrera. Aunque la lesión de Leo no era grave pero coincidió con malas noticias en casa de los Messi. La familia se habían instalado en un piso de Les Corts que les cedió el club. Allí estaban los padres del ‘‘crack’’, sus dos hermanos y su hermana pequeña, María Sol, que no se adaptaba a aquel nuevo medio. Al poco, Jorge, el cabeza de familia, vio como todos volvían a Rosario mientras él se quedaba en la capital catalana con un proyecto de futbolista con la pierna izquierda enyesada.

Cap. 4233: La lesión que pudo acabar con Messi [II]

Fue una jugada desgraciada. El balón llegó rápidamente a su posición, la de extremo zurdo, donde correteaba con el dorsal número 11 a la espalda. Perdió el control y se le fue fuera. Marc Baiges, el diez del Ebre, recibió entonces el saque de banda en fase defensiva. Escorado al lateral, decidió lanzar un pelotazo arriba. Armó la pierna y cuando sólo esperaba sentir el impacto del cuero, una "sombra" irrumpió por su derecha y se interpuso entre su bota y el balón. Fue esa sombra la que recibió el impacto: se oyó un chasquido y ambos rodaron por el suelo; el árbitro no pitó falta. La "sombra" intentó levantarse pero comprendió que no podría hacerlo. Fue en esa jugada desgraciada cuando Messi sufrió la primera y última fractura de su vida. No se había cumplido un minuto de juego y en la retransmisión televisiva de BarçaTv aún repasaban las alineaciones. Marc se disculpaba ante Leo y este abandonó el campo y aquel episodio fortuito quedó sepultado de la memoria de los que jugaron el partido

Cap. 4233: La lesión que pudo acabar con Messi [I]

Era febrero de 2001, en una mañana que comenzó rara. La Federació Catalana había dado distintos horarios a los delegados del Infantil B del Barcelona y del Ebre Escola Esportiva, que iban a enfrentarse en la jornada 27 del Grupo I de la Liga Preferente de infantiles. Para subsanar la confusión, la entidad blaugrana invitó a desayunar a la expedición visitante y poco antes del partido, los jugadores de ambos equipos se hicieron una foto sobre el césped; azares del destino, Marc Baiges se colocó justo encima de Leo, que ya lucía entonces esa sonrisa desangelada. Messi, era un chaval con problemas de crecimiento, en aquellos días apenas levantaba 148 centímetros sobre el suelo, no hablaba jamás y no era la estrella de su equipo. EN esa temporada, la referencia de aquel Barça era Diong Mendy, un portento físico que marcaba en todos los partidos.
Messi no pudo demostrar nada aquel día, pero en el primer minuto de juego se sucedieron dos noticias que pudieron cambiar su historia en el Barcelona. La primera llegó con el silbido inicial: tras un mes esperando el tránsfer y un debut contra el CF Amposta en que marcó, el pequeño argentino sumaba su segundo partido, primero en casa, como infantil y superaba así un requisito federativo imprescindible para jugar en años venideros choques oficiales siendo extranjero y menor de eda