Cap. 9169: Oposición a Núñez, pero asambleas apacibles [I]

Durante los 22 años de gobierno de Josep Lluís Núñez, el más extenso de la historia del club, ningún socio va ni tanto solo plantear públicamente la posibilidad de intervenir decisivamente en las asambleas. El expresidente tuvo una oposición casi permanente desde el 1978, pero todas las asambleas acabaron siendo una balsa de aceite y un acto de aclamación presidencialista que hacía crecer su poder. En su primer año, unos 1.000 socios se reunieron para debatir y criticar la decisión emprendida para superar una crisis económica delicada. Una derrama entre todos los asociados para pagar la deuda, no gustó pero, a pesar de todo y el alboroto generado, la asamblea acabó aprobando la medida. Durante los años 80, a Josep Lluis Núñez le apareció una oposición activa. Una oposición de muchas palabras, de críticas, de manifiestos y de exposición a los medios. Pero nada intervencionista. Los ex Francesc Miró-Sans y Agustí Montal i Costa le tiraban de las orejas, acusando el máximo mandatario de abandonar el socio, pero también de un "menfotismo" (según Montal) peligroso por parte de los propietarios del club. "Las cosas han llegado a un punto en el que no se pueden inhibir, a menos que quieran caer en el grave pecado de dejadez en sus auténticas funciones", expresó Miró-Sans.