El 4 de febrero de 1900, en "La Vanguardia", el periodista Albert Serra
hizo diana de sus criticas en el jugador Fitzmaurice con el siguiente
comentario:
- "Este señor perdió algunos puntos de cargo para su bando, debido a su juego poco limpio"
No sabemos que quería decir exactamente con estas palabra, pero provoco
que Fitzmaurice exigiera a Serra que rectificara publicamente esta
crónica. Ante esta reacción inesperada del jugador, el periodista
comentaba al día siguiente:
- "En nuestra reseña de foot-ball publicada ayer, apareció el señor
Fitzmaurice como jugador poco limpio en dicho partido, jugado el
viernes, debiendo ser otro de los jugadores del Barcelona FC [sic], el
responsable de la falta, pues aquel jugó precisamente con acierto"
Vamos "donde dije digo, digo Diego"
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