Las declaraciones de Pep Guardiola, el 3 de julio de 2010 del partido
anunciando que "Messi no jugará porque no está para competir". Provocó
un "No" monumental en la Sala de prensa por parte de los periodistas
coreanos. Tal era la decepción que se llevaron, que el moderador del
acto y uno de los responsables de la empresa organizadora, se permitian
la licencia de repreguntarle a Pep Guardiola sobre la ausencia del crack
antes de que Pep se levantara para dirigir el entrenamiento...
"¿De verdad que no va a jugar Messi?". A lo que Pep contestó: "No, porque hay un riesgo de lesión al haber hecho sólo un entrenamiento"
La televisión local anunció a la empresa organizadora que si no estaba Messi, no ofrecería el partido y en consecuencia, no pagarían. Con la repercusión que tuvo, la noticia llegó rápidamente a los aficionados que tenían entrada para ver el partido y, muchos de ellos, se presentaron en el hotel, donde se alojaba la expedición blaugrana indignados y con la intención de devolverla. En vista de la reacción del publico y la televisión, el máximo responsable en la organización del encuentro también acudió al hotel del Barça. Desesperado, porque sin televisión, sin patrocinadores y sin aficionados en el estadio, el negocio le suponía directamente la ruina, el máximo responsable del evento montó un espectáculo en el hall del hotel del Barça, tirando incluso los plafones que anunciaban la presencia del equipo blaugrana en Seúl.
"¿De verdad que no va a jugar Messi?". A lo que Pep contestó: "No, porque hay un riesgo de lesión al haber hecho sólo un entrenamiento"
La televisión local anunció a la empresa organizadora que si no estaba Messi, no ofrecería el partido y en consecuencia, no pagarían. Con la repercusión que tuvo, la noticia llegó rápidamente a los aficionados que tenían entrada para ver el partido y, muchos de ellos, se presentaron en el hotel, donde se alojaba la expedición blaugrana indignados y con la intención de devolverla. En vista de la reacción del publico y la televisión, el máximo responsable en la organización del encuentro también acudió al hotel del Barça. Desesperado, porque sin televisión, sin patrocinadores y sin aficionados en el estadio, el negocio le suponía directamente la ruina, el máximo responsable del evento montó un espectáculo en el hall del hotel del Barça, tirando incluso los plafones que anunciaban la presencia del equipo blaugrana en Seúl.
Cap comentari:
Publica un comentari a l'entrada