El 28 de mayo de 2008, la moción de censura planteada por Oriol Giralt y
Christian Castellví tenían 9.473 firmas que estabanb distribuidas en
doce cajas negras, llevadas cada una por miembros del grupo promotor y
el propio Giralt, las firmas entraron en la Oficina de Atención al
Barcelonista en medio de una gran expectación, y en presencia del
director del área jurídica del club, Oriol Ràfols, además de Anna Xicoy,
directora general, y Josep Maria Fontclara, director del área social.
"Los primeros sorprendidos hemos sido nosotros", ha reconocido Giralt.
"Se trata de un número excepcional, sobre todo teniendo en cuenta la
precariedad de nuestros medios y que estamos a final de temporada, sin
partidos en el campo".
Oriol Giralt promotor de la moción aseguró que todas las papeletas habian sido recogidas de forma manual, muchas de ellas en el Hotel Derby. "La gran mayoría de personas ha venido directamente a la sede, y han firmado delante nuestro" [...]. "Es absolutamente imposible que no sean aceptadas". Aunque se ha mostrado convencido de que la moción de censura prosperará, se necesita que vayan a votar un diez por ciento de la masa social y que de éstos, dos tercios sean favorables a la moción, Giralt ha recordado que es "muy importante de cara el futuro" la acción que él y su grupo han tomado.
"Servirá para que ningún presidente más pueda, en ningún caso, hacerla suya. Al socio lo que le importa son los gestos, la actitud y las promesas. El día de hoy es histórico; es muy importante para el Barcelona", ha declarado con contundencia. Giralt ha negado haber recibido el mismo apoyo social y económico que en el caso de la moción contra el ex presidente Josep Lluís Núñez, en 1998, paradójicamente liderada por Laporta. "Ahora lo que sí que hay son los que yo llamo 'palmeros', aquellos que temen perder un buen lugar en el palco". [...] "Pido que, una vez que se haya comprobado que no hay ninguna falsa, este señor dimita (Sala Martin), o que Laporta tome medidas" [...] "Es que se tendrían que someter al voto de censura. La nariz me da que esta vez la junta directiva va a dimitir".
Oriol Giralt promotor de la moción aseguró que todas las papeletas habian sido recogidas de forma manual, muchas de ellas en el Hotel Derby. "La gran mayoría de personas ha venido directamente a la sede, y han firmado delante nuestro" [...]. "Es absolutamente imposible que no sean aceptadas". Aunque se ha mostrado convencido de que la moción de censura prosperará, se necesita que vayan a votar un diez por ciento de la masa social y que de éstos, dos tercios sean favorables a la moción, Giralt ha recordado que es "muy importante de cara el futuro" la acción que él y su grupo han tomado.
"Servirá para que ningún presidente más pueda, en ningún caso, hacerla suya. Al socio lo que le importa son los gestos, la actitud y las promesas. El día de hoy es histórico; es muy importante para el Barcelona", ha declarado con contundencia. Giralt ha negado haber recibido el mismo apoyo social y económico que en el caso de la moción contra el ex presidente Josep Lluís Núñez, en 1998, paradójicamente liderada por Laporta. "Ahora lo que sí que hay son los que yo llamo 'palmeros', aquellos que temen perder un buen lugar en el palco". [...] "Pido que, una vez que se haya comprobado que no hay ninguna falsa, este señor dimita (Sala Martin), o que Laporta tome medidas" [...] "Es que se tendrían que someter al voto de censura. La nariz me da que esta vez la junta directiva va a dimitir".
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