En 1909 se debía jugar una trofeo, la Copa Paris-Barcelona, entre el equipo una selección de jugadores del Barça y el Espanyol y el Racing de Paris. Después de dar su conformidad y recibir el dinero pedido para efectuar el viaje, el club francés escribio tranquilamente una carta, que llegó el día anterior al partido, diciendo que por falta de un par de jugadores, se veía imposibilitado de acudir a jugar en la fecha comprometida. Los organizadores telegrafiaron inmediatamente y con urgencia, diciendo fueran suplidos los jugadores, con otros cualesquiera, y que se pusieran en seguida en camino para llegar a ésta en tiempo hábil, aunque para ello fuera preciso tomar el rápido, pues ellos pagarían todos los gastos. La contestación para que era imposible. Además tenían otro partido para el mismo 25 de septiembre, jugaban ante el Union Sport Tourcoing FC campeón en aquellos días de Francia. Durante el descanso del primer partido se celebró una carrera á pie de 1000 metros que ganó el campeón de Catalunya Boix, seguido de Donday y Santos; luego, la guardia municipal a caballo que dejó el campo hecho una lástima
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