El 22 de octubre de 2001, los intermediarios futbolísticos Joaquín Martínez y Orlando Giménez reclamaban públicamente al futbolista argentino Javier Saviola y a su representante, Alfredo Cabrera Brizuela, que reconocieran su mediación en el fichaje del jugador por el FC Barcelona y el pago de sus respectivas comisiones.
Orlando Giménez y Joaquín Martínez, propietarios de la empresa argentina Córdoba Sports, se desplazaron desde Buenos Aires a Barcelona para explicar en rueda de prensa los motivos de la demanda de conciliación que interpusieron el día 19 de octubre en un juzgado de Barcelona para intentar forzar un acuerdo amistoso con el jugador. Ambos sostenian que acordaron verbalmente con Cabrera Brizuela cobrar como comisión un 30 por ciento del montante del traspaso del "Conejo" Saviola, por gestiones como las de negociar directamente las cantidades a cobrar por el jugador.
Cap comentari:
Publica un comentari a l'entrada