Gustau Biosca, era un enorme deportista y un "playboy" de la época. Eran conocidas sus andanzas tanto en el césped como en la vida social barcelonesa. Extravagante en ocasiones, llegó a presentarse a un entrenamiento del equipo montado a lomos de un caballo blanco que le prestó un amigo Comandante de un Cuartel de Caballería. Llegó al entrenamiento dirigido por Daucik y se dirigió al técnico al más puro estilo indio:
- "Hau, Toro Sentado te saluda".
Bien parecido, amante de la vida nocturna, era un habitual de los locales de la moda barcelonesa junto a Kubala, el hombre que lo bautizó como Gitano. Su planta y ojos claros rompieron muchos corazones, como el de Lola Flores, uno de los chascarrillos más celebrados por la prensa rosa de la época.
- "Hau, Toro Sentado te saluda".
Bien parecido, amante de la vida nocturna, era un habitual de los locales de la moda barcelonesa junto a Kubala, el hombre que lo bautizó como Gitano. Su planta y ojos claros rompieron muchos corazones, como el de Lola Flores, uno de los chascarrillos más celebrados por la prensa rosa de la época.
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