El día comenzaba, con una sesión suave e intrascendente, de esta manera
cerraba el Barcelona su preparacion con vistas al importante encuentro
en el "Santiago Bernabeu". Como era costumbre en visperas de partido,
los jugadores convocados se limitaron a dar unas vueltas
desentumecedoras al campo, mientras él trabajo más intenso fue para los
reservas y los porteros. Fue precisamente en ese apartado el que
concentraba el interés del entrenamiento, de los aficionados y de la
prensa, ya que, por primera vez en toda la semana, Salvador Sadurní se
colocaba bajo de los palos, sometido a un fuerte bombardeo por Cos,
Gallego, Aicart, Barrios, Carreño y Martí Filosía, todos bajo la atenta
mirada de Michels. La impresión, para todos, era completamente positiva; el portero "titular" blaugrana se mostraba en su línea normal, luciéndose por alto y por bajo y estirándose con decisión y sin resentirse en absoluto de los dolores que le aquejaban en el codo. De esta manera todos daban por seguro, a salvo de un empeoramiento de última hora, la inclusión de Saduní en ese "once" que se enfrentaría inicialmente al Madrid, y que sería el ya anunciado por Michels: "Sadurní, Rifé, Costas, De la Cruz, Juan Carlos Torres, Rexach, Asensi, Cruyff, Sotil y Marcial. En la banda, para un posible cambio quedabán Mora, Tomé, Laredo y Juanito
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