El 28 de noviembre de 1978 estallaba el "Caso Heredia". La directiva del
Barcelona, presidida por Josep Lluis Núñez, decidía apartar del equipo
al delantero "Milonguita" Heredia, que tuvo un enfrentamiento con Rifé
en el entrenamiento del lunes 26. La vida privada de Heredia había sido
objeto en las últimas semanas de investigación, por parte de detectives
contratados por el Barcelona. Todo había comenzado con la derrota del
domingo 25 en el Calderon. El argentino Juan Carlos Heredia iniciaba su
polémico protagonismo, señalando ya en los vestuarios colchoneros su
intención de abandonar el Barcelona y la selección española, el lunes
por la mañana Heredia se negaba a entrenar y Rifé se empeñó en que lo
hiciera. Heredia argumentaba que regresó lesionado de Madrid, y que
otros jugadores por mucho menos no entrenaban; Rifé cedió hasta llegar a
suplicar al ariete argentino que saltara al campo, "aunque sólo fuera a
tomar el sol". Heredia no atendió ni esta ni otras razones y aumentó
las acusaciones, amenazas y hasta insultos al técnico y al propio club.
Así las cosas, el resto de jugadores, con el segundo entrenador, Antonio
Torres, salieron discretamente de los vestuarios, mientras Rifé y
Heredia iniciaban una acalorada discusión, cuya vehemencia a punto
estuvo de hacerles llegar a las manos. Por la tarde se reunian y
apartaban del equipo a Juan Carlos Heredia, cuyo destino era volver a
Argentina
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