El Barça de balonmano estuvo una vez más a la altura del mejor equipo
del mundo y abrió un acontecimiento tan importante para el club como su
"Centenario" con la
consecución de la tercera Supercopa de Europa. De esta manera, Valero Rivera, técnico de la plantilla desde febrero de 1984, podía celebrar la consecución del título número 50 ante su afición. Enfrente tuvieron a un rival ya clásico en el Viejo Continente, el Badel Zagreb, que una vez más acababa cediendo, por 28-22, ante el poderío del bloque blaugrana.
Valero Rivera vivió una jornada mágica cuando el público del Palau Blaugrana coreaba su nombre en los instantes finales del partido.
- "Me he emocionado porque es un título muy especial. Se lo dedico a todos los jugadores que he entrenado y a quien me dio la oportunidad de estar aquí".
Evidentemente, se refería a Josep Lluís Núñez, que le entregó una placa conmemorativa por esta efemerides. El presidente aseguró que el "técnico se merecía algo así, porque el Barça es el mejor club del mundo"
consecución de la tercera Supercopa de Europa. De esta manera, Valero Rivera, técnico de la plantilla desde febrero de 1984, podía celebrar la consecución del título número 50 ante su afición. Enfrente tuvieron a un rival ya clásico en el Viejo Continente, el Badel Zagreb, que una vez más acababa cediendo, por 28-22, ante el poderío del bloque blaugrana.
Valero Rivera vivió una jornada mágica cuando el público del Palau Blaugrana coreaba su nombre en los instantes finales del partido.
- "Me he emocionado porque es un título muy especial. Se lo dedico a todos los jugadores que he entrenado y a quien me dio la oportunidad de estar aquí".
Evidentemente, se refería a Josep Lluís Núñez, que le entregó una placa conmemorativa por esta efemerides. El presidente aseguró que el "técnico se merecía algo así, porque el Barça es el mejor club del mundo"
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