En 1993 TVE y la Central Films coproducian una serie de ficción
Televisiva sobre la vida del futbolista Darren Matthews (Lloyd Owens).
Esta serie parecía como una biografia de Gary Lineker y el jugador y
Manuel Vázquez Montalban (qepd) revisarian el guón
La serie comenzaba cuando Darren Mathews llega a Barcelona procedente de un pequeño club británico de fútbol. Muy pronto se da cuenta de que jugar en el FC Barcelona supone la oportunidad de formar parte de uno de los equipos más importantes del mundo. O al menos ésa es la impresión del protagonista, según el guión de la serie. Pero hay algo más: la dificultad de Matthews por integrarse en el club y adaptarse a su nueva vida.
Ese era el hilo argumental de Delantero, una coproducción que costó 3,6 millones de libras esterlinas (unos 700 millones de pesetas) cuyo reparto incluía, junto a los británicos Lloyd Owens y Clara Salaman, a los actores españoles Simón Andreu, Xabier Elorriaga, Eva Cobo y Abel Folk. El equipo de "Delantero" ha contado con la colaboración del FC Barcelona, "a pesar de la gran concentración que requería las últimas jornadas de aquella Liga", recuerda Chris Burt, productor de la serie. Esta colaboración permitió a Burt colocar a sus cámaras y a sus actores sobre la hierba del Camp Nou. Pero no fue suficiente para que los verdaderos jugadores del club participaran en la serie. "Ninguno de ellos es capaz de entrenarse durante ocho horas seguidas", bromeaba el productor.
La relación entre Gary Lineker y Delantero no se redució solo al simple paralelismo entre un episodio de la vida del jugador y las aventuras del personaje de ficción. L¡neker actuaó como asesor de la serie y, además, intepretaba, en una breve aparición, el papel de un anciano y veterano jugador de fútbol que aconsejaba a Darren. Meter goles, aprender el idioma y no hablar de política son las claves del éxito, que el jugador pone en manos del joven Matthews. Pero, como se apresura a puntualizar Burt, las diferencias también son notables: Lineker disfrutaba de una feliz relación matrimonial cuando llegó a Barcelona, y se integró de una manera natural en la plantilla azulgrana y muy pronto aprendió a hablar castellano con cierta fluidez. Darren Matthews presentaba un carácter totalmente opuesto. Mantiene una relación llena de altibajos con su novia de toda la vida. Esta acabará por abandonarlo. Además, Darren demostraba la misma incapacidad en el aprendizaje del castellano que en la relación con sus compañeros.
La serie comenzaba cuando Darren Mathews llega a Barcelona procedente de un pequeño club británico de fútbol. Muy pronto se da cuenta de que jugar en el FC Barcelona supone la oportunidad de formar parte de uno de los equipos más importantes del mundo. O al menos ésa es la impresión del protagonista, según el guión de la serie. Pero hay algo más: la dificultad de Matthews por integrarse en el club y adaptarse a su nueva vida.
Ese era el hilo argumental de Delantero, una coproducción que costó 3,6 millones de libras esterlinas (unos 700 millones de pesetas) cuyo reparto incluía, junto a los británicos Lloyd Owens y Clara Salaman, a los actores españoles Simón Andreu, Xabier Elorriaga, Eva Cobo y Abel Folk. El equipo de "Delantero" ha contado con la colaboración del FC Barcelona, "a pesar de la gran concentración que requería las últimas jornadas de aquella Liga", recuerda Chris Burt, productor de la serie. Esta colaboración permitió a Burt colocar a sus cámaras y a sus actores sobre la hierba del Camp Nou. Pero no fue suficiente para que los verdaderos jugadores del club participaran en la serie. "Ninguno de ellos es capaz de entrenarse durante ocho horas seguidas", bromeaba el productor.
La relación entre Gary Lineker y Delantero no se redució solo al simple paralelismo entre un episodio de la vida del jugador y las aventuras del personaje de ficción. L¡neker actuaó como asesor de la serie y, además, intepretaba, en una breve aparición, el papel de un anciano y veterano jugador de fútbol que aconsejaba a Darren. Meter goles, aprender el idioma y no hablar de política son las claves del éxito, que el jugador pone en manos del joven Matthews. Pero, como se apresura a puntualizar Burt, las diferencias también son notables: Lineker disfrutaba de una feliz relación matrimonial cuando llegó a Barcelona, y se integró de una manera natural en la plantilla azulgrana y muy pronto aprendió a hablar castellano con cierta fluidez. Darren Matthews presentaba un carácter totalmente opuesto. Mantiene una relación llena de altibajos con su novia de toda la vida. Esta acabará por abandonarlo. Además, Darren demostraba la misma incapacidad en el aprendizaje del castellano que en la relación con sus compañeros.
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