Paralelamente a la época explendorosas del CD Condal, existía en la ciudad existe otro club con amplia tradición igualmente fabril que destaca por su caracter polideportivo, el Club Deportivo Fabra y Coats, fundado en 1922 por la empresa del mismo nombre y que contaba con varias secciones deportivas para sus empleados: natación, atletismo, hockey hierba y tenis entre otros, destacando sobre todos la sección de fútbol que mantenía una plaza en Tercera División.
En el verano de 1965 y en concordancia con lo sucedido con el CD Condal, la empresa se desvincula de esta sección por la dificultad de mantener un equipo en dicha categoría, adquiriendo esta independencia bajo el nombre de Atlético Catalunya CF y pasando a estar vinculada desde entonces al FC Barcelona, entidad que desde 1967 contó con un filial propio, el Barcelona Aficionados, que era equipo amateur que combinaba en sus filas a juveniles con jóvenes promesas hasta su desaparición bajo la presidencia de Joan Laporta.
En el verano de 1965 y en concordancia con lo sucedido con el CD Condal, la empresa se desvincula de esta sección por la dificultad de mantener un equipo en dicha categoría, adquiriendo esta independencia bajo el nombre de Atlético Catalunya CF y pasando a estar vinculada desde entonces al FC Barcelona, entidad que desde 1967 contó con un filial propio, el Barcelona Aficionados, que era equipo amateur que combinaba en sus filas a juveniles con jóvenes promesas hasta su desaparición bajo la presidencia de Joan Laporta.