El 27 de agosto de 2009, en el Fórum Grimaldi del Principado de Mónaco
acogía la gala de la UEFA, en la que se iban a entregar los premios a
los mejores de la Champions League de la temporada 2008/09. Y el FC
Barcelona practicamente arrasó en casi todas las categorias. Si en Roma
el Barça ponía la primera piedra al ganar como conjunto la Champions.
Ahora tocaba el reparto individual, en el que Messi volvió a ser la
estrella que brilló con mayor intensidad. El crack argentino se llevó el
premio al mejor jugador, por delante de sus compañeros Xavi e Iniesta,
que habían ganado el europeo. El podio, pues, sólo tuvo color blaugrana.
Leo también cosechó la distinción al mejor delantero, por delante de
Cristiano Ronaldo, entonces en el Manchester United y su compañero Eto’o
y por anotar el mejor gol, ante el Olympique de Lyón (5-2) en el Camp
Nou. Xavi fue el otro gran protagonista de la gala al ganar el premio al
mejor centrocampista, por delante de Iniesta, que fue segundo. Otros
jugadores, como Valdés y Piqué, fueron segundos en el apartado de
porteros y defensas respectivamente, superados por Van der Sar
(Manchester United) el primero y Terry (Chelsea) el segundo.
Messi, por primera vez estaba en lo más alto del escalafon europeo y como es natural en el, no se olvido de quienes le habían ayudado a llegar hasta ahí: "Si hoy estoy aquí recogiendo estos premios es gracias a todo el equipo, que siempre me ha ayudado" y es que Messi es grande hasta en los momentos en los cuales a muchos (diria que una mayoría) les supera el egocentrismo.
Messi, por primera vez estaba en lo más alto del escalafon europeo y como es natural en el, no se olvido de quienes le habían ayudado a llegar hasta ahí: "Si hoy estoy aquí recogiendo estos premios es gracias a todo el equipo, que siempre me ha ayudado" y es que Messi es grande hasta en los momentos en los cuales a muchos (diria que una mayoría) les supera el egocentrismo.